Reúne a tus amigos, enciende una vela como símbolo del fuego que transforma el agave, y sirve 400 Conejos Espadín Joven en jícaras de barro. Brindemos juntos: “¡Para todo mal, mezcal, y para todo bien, también!”. Este ritual ancestral nos recuerda la leyenda de Mayahuel y sus 400 hijos conejos, cada uno representando una personalidad única del mezcal.
Puro y ahumado, como el primer encuentro con el mezcal. Acompáñalo con naranja y sal de gusano para despertar tus sentidos.
Exótico y floral, como un paseo por el campo. Disfrútalo en sorbos pequeños para descubrir su complejidad.
Robusto y terroso, como un abrazo cálido. Ideal con quesos fuertes o chocolate oscuro.
Profundo y elegante, como una noche de estrellas. Saboréalo solo o en un cóctel sofisticado.
¿Sabías que nuestros agaves se cocinan lentamente en hornos de piedra durante días? Este proceso artesanal, transmitido de generación en generación, es el corazón de 400 Conejos. Comparte estos datos con tus amigos y conecten con la historia detrás de cada botella.
Al final del día, salgamos a contemplar las estrellas con un 400 Conejos Tobalá o Añejo en mano. Reflexionemos sobre la tradición y la magia del mezcal, un espíritu que nos une a la tierra y a nuestra cultura.
El Día del Mezcal con 400 Conejos es una celebración de la amistad, la tradición y el sabor. ¡Únete a la fiesta y comparte tus momentos con nosotros!