¡Que suenen las jícaras! El Día del Mezcal es nuestro
Imagina un atardecer en Oaxaca, el aire impregnado de humo de agave y el sonido de las jícaras chocando en un brindis. Así se siente el Día del Mezcal, una fiesta que nos conecta con nuestras raíces y celebra la magia de esta bebida ancestral. Con 400 Conejos, cada sorbo es un viaje a través de la tradición y el sabor.
¿Listos para vivir la leyenda? El ritual de apertura
Reúne a tus amigos, enciende una vela como símbolo del fuego que transforma el agave, y sirve 400 Conejos Espadín Joven en jícaras de barro. Brindemos juntos: “¡Para todo mal, mezcal, y para todo bien, también!”. Este ritual ancestral nos recuerda la leyenda de Mayahuel y sus 400 hijos conejos, cada uno representando una personalidad única del mezcal.

Un viaje por las personalidades de 400 Conejos
- Espadín Joven: Puro y ahumado, como el primer encuentro con el mezcal. Acompáñalo con naranja y sal de gusano para despertar tus sentidos.
- Reposado: Notas de caramelo y vainilla, como una charla entre amigos. Perfecto con tacos al pastor o mole negro oaxaqueño.
- Tobalá: Exótico y floral, como un paseo por el campo. Disfrútalo en sorbos pequeños para descubrir su complejidad.
- Cuishé: Robusto y terroso, como un abrazo cálido. Ideal con quesos fuertes o chocolate oscuro.
- Añejo: Profundo y elegante, como una noche de estrellas. Saboréalo solo o en un cóctel sofisticado.
Cocteles con alma de conejo

Mezcal Margarita: 400 Conejos Espadín Joven, lima y agave. Un clásico con un toque ahumado.
Oaxacan Negroni: 400 Conejos Reposado, vermut y amargo de naranja. Elegante y complejo.
Conejo Fizz: 400 Conejos, cítricos y soda. Refrescante y burbujeante.
Compartamos la sabiduría del mezcal
¡Que viva el mezcal, que viva 400 Conejos!
